En las intenciones de oración del mes de junio El Santo Padre nos pide orar especialmente por los ancianos y enfermos desatendidos, y es que existen varios colectivos de personas especialmente vulnerables, unas por el abandono de las familias, otras porque no pueden valerse por sí mismos.
Las personas mayores alcanzan en un momento de sus vidas, el máximo agotamiento natural, proveniente de la vejez, o de enfermedades que encuban en el transcurso del tiempo y eso permite que desaparezcan sus fuerzas, por eso ya no pueden trabajar, en ocasiones vuelven a un estado senil, quedando totalmente desvalidos; tenemos la suerte de vivir en un país en que al menos están garantizados los derechos mínimos de existencia y así existen los salarios sociales básicos y las ayudas de la administración para las rentas mínimas o inexistentes, la pensión no contributiva de jubilación, etc. , así como el apoyo de la Iglesia.
Pero existen lugares en el mundo en los que las cosas no son así, vamos a viajar a una ciudad llamada Ciego de Ávila , en el centro de la isla de Cuba; allí la vida resulta dura diariamente para el ciudadano común, el salario que se obtiene del trabajo apenas alcanza para mal comer, así que las familias “inventan” para poder subsistir , buscándose la vida como pueden en una economía sumergida que es la que permite vivir a la población, día a día, con estrecheces , con angustias pero sobre todo con mucha lucha.
El gobierno comunista de la isla presenta una serie de programas sociales que en teoría deben cubrir las necesidades de sus ciudadanos, pero en la práctica y en la realidad no funcionan, especialmente para los enfermos y para los ancianos para los que su sueldo de jubilación no supera los 10 euros mensuales ; dada la situación actual, muchas familias han optado por migrar y han dejado prácticamente abandonados a eso ancianos, otros porque ya no disponen de fuerzas vagan por las calles en busca de algo que comer o llevar para sus casas.
Pero como Dios no abandona a nadie, en esta ciudad, existen cuatro monjas que pertenecen a las Hermanas de la Caridad y hacen lo imposible para darles de comer, aunque sea dos veces por semanas a esas personas.
Es un acto de amor lleno de misericordia, antes del almuerzo rezan juntos un rosario o leen la palabra para que todos no pierdan la fe y sigan adelante, luego se alimentan y además llevan para sus casas, inicialmente se podía hacer una vez por semana, luego con la ayuda de hermanos que tienen un gran corazón y están llenos de fe y amor porque han sido bendecidos por el Espíritu Santo, extendieron a dos veces por semana. el servicio de alimentación.
Las Hermanas de la Caridad hacen un trabajo apreciable, en un fogón de leña, con carbón vegetal y prácticamente sin condiciones, pero con la fe y el amor a Jesús han logrado mantener el servicio y lo más importante es que cada día alimentan la fe y la esperanza de esos ancianos que de un momento a otro se han visto en el abismo, pero Dios les ha enseñado a volar.
Pero pensemos también “No solo de pan vive el hombre”, ¿cuántas de estas personas conocerán a Jesús?, ¿cuántas de estas personas estarán solas sin esperanza? Viendo que la vida se les escapa entre las manos, que cumplen años y que el fin se acerca, quizá ni siquiera hayan oído hablar de Jesús, de las Bienaventuranzas, de la Vida Eterna, ¡¡cuánto bien pueden hacer esas Hermanas de la Caridad no solo en el cuerpo sino en el Alma de todos esos ancianos!!, explicarles que Dios les ama infinitamente, que la muerte no existe, solo es una puerta que hay que traspasar pero que luego está la vida eterna.
San Mateo nos cuenta como Jesús al ver el gentío le dio lástima y dijo a sus discípulos, “Dadles vosotros de comer”, esa misma petición nos la hace a sus discípulos de hoy en día, “Dadles vosotros de comer”, que donde haya necesidad podamos ayudar poniendo comida para el cuerpo y más importante aún, “comida para el alma”.
Vamos a comenzar hoy una iniciativa de ayuda para estas hermanas de la Caridad de Ciego de Ávila, el primer paso es conocerlas, saber que existen y la labor que realizan , hablaremos con las Hermanitas, seguiremos dando pasos y os tendremos al corriente de todo.
¡¡Tú puedes ayudar!! ¿Quieres?