En el Evangelio de hoy Andrés va corriendo a decirle a su hermano Simón que ha encontrado al Mesías, entonces lo llevó donde estaba Jesús , el cual lo miró y le dijo “Tu eres Simón, el hijo de Juan: tú te llamarás Cefas”, que traducido significa piedra.
Jesús al conocer a Simón inmediatamente le cambia el nombre y le llama Pedro y más adelante nos dice que sobre esa roca edificará su Iglesia; es de esa manera que Jesús establece el Primado de Pedro, definido como dogma de fe en el Concilio Vaticano I.
Junto al mar de Galilea, en Tabgha, está la Iglesia de piedra de la Primacía de Pedro construida por los franciscanos en 1933. Es un lugar de una belleza increíble , rodeado de abundante vegetación, lo cual es lógico estando a las orillas del lago. Dentro de la iglesia existe una gran roca que la tradición señala como el lugar en que los discípulos desayunaron pescados con Jesús, luego de su resurrección. La roca es llamada Mensa Christi o mesa de Cristo. Allí Jesús dio a Pedro el mandato: » Apacienta mis ovejas».
A lo largo de los siglos han surgido ideas nuevas, algunos quieren acomodar la doctrina católica a los nuevos tiempos, tras más de dos mil años han acontecido separaciones, segregaciones, todas interesadas y basadas en fundamentos humanos, no divinos; La Iglesia de Cristo es una y está donde esté el Primado de Pedro y hoy Pedro está en el Papa de Roma.
La razón por la cual la Basílica Vaticana se construyó en Roma es porque debajo está la tumba de San Pedro; son muy interesantes los estudios realizados para la identificación científica de la tumba y de los restos de San Pedro en esa necrópolis romana.
Todos los cristianos deberíamos estar unidos en la Iglesia de Cristo, todos deseamos con fuerza ese reencuentro, pero como decía Juan XXIII esa unión no puede venir del sacrificio de parte de la verdad, sino de un profundizar más en el conocimiento de esa verdad.
Las divisiones de los cristianos disgustan a Dios pues esa no es su voluntad; nuestro Papa Francisco no desaprovecha ninguna oportunidad en la cual pueda ofrecer gestos de comprensión y hermandad , hoy se busca incansablemente el ecumenismo pues realmente todos somos hermanos en Cristo.