La Vigilia de las Espigas es una celebración muy antigua y muy tradicional en la Adoración Nocturna ; este Sábado día 2 de Julio , se celebró en Mieres la 99 edición en la Parroquia de Nuestra Señora del Carmen de los Padres Pasionistas, fue una experiencia increíblemente bella que es preciso dar a conocer.
En su origen era una fiesta para dar gracias a Dios por las cosechas pero al ir evolucionando el mundo , este sentido cambia y en vez de dar gracias por las cosechas se da gracias a Dios por los logros del trabajo humano , poniendo nuestro trabajo en sus manos para que Él lo transforme en frutos de redención, así nos lo cuentan el grupo organizador en el librito que nos entregan junto con una vela al empezar la celebración.
Comenzamos con la procesión de banderas, abre la marcha la Cruz Parroquial a la cual siguen en fila central las banderas y en fila doble todos nosotros, cierran la marcha los representantes del Consejo Diocesano, sacerdotes y autoridades.
Fuimos rezando el rosario dirigidos por el padre Adolfo y tras una breve procesión alrededor de la plaza que se sitúa justo delante de la Iglesia , entramos en el Templo “¡Qué alegría cuando me dijeron!” el Órgano toca y el ambiente ya te envuelve, entramos en la casa de Dios, en la presencia real de Jesús, seguimos recitando himnos preciosos “Hoy Señor te damos gracias, por la vida , la tierra y el sol, Hoy Señor queremos cantar las grandezas de tu Amor”.
Comienzan las lecturas, los salmos de vísperas, se leen los textos y se cantan los salmos, “Señor , Dios nuestro, Qué admirable es tu nombre , en toda la tierra”, “Aclamad al Señor tierra entera”, “Te damos gracias Señor de todo corazón”, poco a poco los cantos y las lecturas te van introduciendo en ese ambiente de oración, en la alabanza y te das cuenta de que el tiempo no importa, viene la paz .
Tras las oraciones comenzó la Eucaristía, toda cantada, concelebraban bastantes padres, en la Liturgia Eucarística las ofrendas, la presentación de adoradores , se le ofrecieron al Señor todos los trabajos con sus sacrificios, obreros, albañiles, carpinteros,canteros,oficinistas,marinos,aviadores,soldados,guardias,conductores,científicos,técnicos,médicos,enfermeras, etc.etc.
Tras la Eucaristía comenzamos la Adoración ¿podía ser más hermoso? , nos dejaron a Jesús Sacramentado expuesto y volvimos a rezarle y a cantarle y se respiraba un ambiente especial porque veías que todo el mundo tenía las mismas sensaciones, todos estábamos allí convencidos de lo mismo, de que Cristo vivo se hacía presente junto a nosotros; cantamos Himnos y Salmos y seguro que Jesús también cantó con nosotros, “Bendice alma mía al Señor, Dios mío! Qué grande eres!! .
Y tras las lecturas salimos en Procesión nuevamente con las banderas pero también con Jesús, ya era de noche, se encendieron las velas y cantando salimos recorriendo junto a Cristo las calles de Mieres y no podía evitar pensar ¡¡Cuánto necesitan nuestras calles de la bendición del Señor!! Y Él vivo paseó por Mieres como paseaba por Galilea, acompañado de todos nosotros, ¡¡realmente fue precioso!!.