El monasterio de Santo Toribio de Liébana, se encuentra en Cantabria, localizado en el centro geográfico de la comarca lebaniega, próximo a Potes; es de los monasterios más antiguos de España, en la actualidad lo cuidan y habitan los Franciscanos, este lugar guarda la reliquia más grande de la Santa Cruz de Cristo, denominada Lignum Crucis.
Al tener conocimiento de su existencia concurrimos rápidamente a conocerla, fue un precioso día de esos que el sol envuelve todo en su fuego impetuoso y el cielo azul refleja la hermosura de la creación, al llegar pensé encontrarla bajo llave completamente reservada, ¡una reliquia de tal valor!, pero no, tropezamos con ella nada más entrar, situada totalmente de frente, en el Altar Mayor de la Iglesia, ¡imponente!, ¡enorme!, engarzada en una cruz de plata dorada, ¡majestuosa!.
Quedas en ese momento completamente pasmado, pues eres consciente de estar presenciando algo de incalculable valor, la mente se traslada en el tiempo y algo dentro de ti te dice, ¡es verdad! ¡es la Cruz! ¡está frente a mí!.
Esa sensación de encontrarte con algo asombroso de golpe, sin estar preparado pues esperas hallarlo de otra manera, es impactante y genera un sentimiento interior de recogimiento y de paz que solo te permite dar gracias una y otra vez por poder estar ante algo tan precioso, ya una vez sentí esa sensación delante de la Sábana Santa de Turín.
Las medidas del leño son de 635 mm el palo vertical y 393 mm el travesaño, con un grosor de 38 mm, un análisis científico de la madera realizado por el Instituto Forestal de Investigaciones y Experiencias de Madrid en 1958, determinó que la especie botánica de la madera es Cupressus Sempervivens, tratándose de una madera extraordinariamente vieja y que nada se opone a que alcance la edad pretendida.
No se sabe a ciencia cierta cómo fue descubierta, existen varias leyendas, en cualquier caso la tradición habla de Santa Elena, madre de Constantino y le atribuye el descubrimiento, se habla también del hallazgo del títulus y de un milagro de curación para determinar cuál de las cruces era la verdadera, pero lo cierto es que no sabemos exactamente qué pasó, sin embargo, sabemos que se venera desde entonces y que a partir de la invasión de Jerusalem por los persas en el año 613 y la reconquista de la ciudad por los musulmanes en el 638, comenzó la reliquia a estar cuando en manos de los musulmanes, cuando en manos de los cristianos.
Es Santo Toribio, obispo de Astorga, natural de Galicia y nacido en el siglo III, quien trae la reliquia de Jerusalén a España, escapando esta vez de la invasión bárbara y es en el Siglo VIII cuando los restos de Santo Toribio y el Lignum Crucis fueron trasladados al monasterio de San Martín de Liébana, que con el tiempo tomó el nombre de Santo Toribio de Liébana. Allí se venera solemnemente el Lignum Crucis hoy en día, teniendo un célebre Año Jubilar propio, cada año que el 16 de abril cae en domingo.
Cuesta imaginar las vicisitudes que durante 2000 años habrán vivido estas reliquias y junto con ellas todas las personas que las han cuidado y velado para que pudieran llegar a nuestros días y hoy en pleno siglo XXI puedas disfrutar de un regalo tan maravilloso.